Brasil volvió con furia a la cima

Internacional se proclamó campeón de la copa Libertadores en otro año mundialista, en este 2010, al igual que en el 2006, es el soberano de América. El capitán del Inter, Bolívar, alzó la tan ansiada copa, que se había quebrado un poco antes de entregársela a los ganadores, pero que al final pudieron reparar. En Brasil, venció a Chivas por 3 a 2 en un intenso partido al que dio vuelta, pese a estar perdiendo, pues se recuperó y terminó derrotando a su rival de forma clara y rotunda. En lo que parecía un primer tiempo sin muchas emociones, con un Inter dormido y un Chivas ansioso pero no preciso, se convirtió en un emocionante encuentro con el golazo conseguido por Marco Fabián.

En el entretiempo, hubo mucha incertidumbre porque los mexicanos habían conseguido igualar la serie y, por lo tanto, forzarían el alargue. Sin embargo, el delantero Rafael Sobis, recordado en la anterior final sudamericana ganada por el cuadro de Porto Alegre, logró empatar el partido y darles un respiro a los aficionados de su club. Tras ese gol, el Chivas de México fue intentando presionar como antes, pero con menos recursos debido a que su rival carioca había despertado. Cuando faltaban tan sólo 12 minutos para el final, Damiao marcó para los locales. El toque ginal lo dio el joven Giuliano, pues con su gol hizo estallar a todo el estadio con el grito de "Campeón". Ni el gol del 3 a 2 convertido por Omar Bravo alcanzó.

Finalmente, cuando el árbitro pitó el final del encuentro, se desató la hecatombre. La alegría de los jugadores quedó de lado, se repartieron puñetes con los de Chivas debido a un conflicto que surgió tras la mala asimilación de la derrota de parte de los mexicanos y la mala reacción del lado de los brasileños. Este hecho lamentable opacó en cierto modo esta final de la Libertadores, aunque después no hubo ningún problema a la hora de recibir las medallas del 1er y 2do puesto. Esperemos que en las siguientes ediciones no se repita lo sucedido este año, pues merma el espectáculo y la alegría de los hinchas fieles que acuden a los recintos deportivos para alentar a su equipo. Nuevamente, la Copa vuelve a Brasil.