miércoles, 8 de septiembre de 2010

Lloraste por mí, España

Argentina dilapidó a la campeona del mundo por 4-1 en el amistoso que se disputó en tierras gauchas. El Monumental de River Plate fue testigo de una victoria histórica en la que se pudo ver la mejor versión de Messi, una vuelta de los jugadores relegados por Maradona y un resultado que, probablemente, ratificará a Sergio Batista en el cargo.


Tras la enorme decepción en Sudáfrica, el cuadro albiceleste quiere dejar los malos recuerdos atrás y reponerse pensando de cara a Brasil 2014. Los goles fueron exclusivamente de la delantera de lujo que posee el conjunto sudamericano. Lionel Messi anotó un exquisito tanto y salió ovacionado del campo casi al final. Gonzalo Higuaín es el referente de área y, con su conocida rapidez, marcó un gol en el que se lo llevó al arquero. El tercer gol fue obra del oportunismo de Tévez, tras un blooper de Reyna que se resbaló cuando iba a patear el balón, el Apache le ganó y logró meterla al fondo de la red.


Así finalizó el primer tiempo, con un marcador que dio la vuelta al mundo debido a que se trataba de La Roja. Sin embargo, Fernando Llorente, del Athletic de Bilbao, aprovechó una desconcentración argentina y descontó para el cuadro europeo. Cuando se creyó que vendría una remontada, a poco de concluir el partido, Sergio Agüero anotó el cuarto, con participación de Andrés D'Alessandro que tan sólo estaba unos minutos en cancha. Al finalizar el encuentro, nadie podía creer el resultado, pero esto le sirvió al conjunto local para sobreponerse anímicamente. Quizá fue un simple amistoso y no de manera oficial, pero se ganó al reciente campeón y, nuevamente, el país del tango se ilusiona con ver nacer a otros héroes que levanten la copa.

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